Las Mansiones de la Locura

Las Mansiones de la Locura

Enviado por Kether con fecha 11/01/2012 00:00
Reseña de uno de los juegos de tablero del 2011 más atractivos inspirado en el Arkham Horror

A veces es conveniente recordar como los juegos de rol nacieron de la mano de Gary Gigax como una especie de (re)evolución de los juegos de mesa de toda la vida con dados, figuras y tableros, y es curioso como, aun habiéndose separado ambas aficionas, a veces, intentan aproximarse en sus mecanismos la una a la otra, como es el caso de este Mansiones de la Locura.

De los creadores de Arkham Horror, que es un juego cooperativo que consiste en cerrar portales para evitar el despertar y derrotar al primigenio de turno, llega este juego que pretende aproximar la auténtica experiencia de los Mitos de Cthulhu que ideo H.P. Lovecraft.

Para ello Las Mansiones de la Locura "convierte" el Arkham Horror (y digo convierte, porque han reciclado muchas imágenes y estética de ese juego) en algo más parecido a un dungeon crawler (Doom, Descent, Heroquest, et al), con su correspondiente "Guardián de los Arcanos", o máster cómo decimos por aquí la vieja guardia rolera, y además le añade un toque de trasfondo narrativo.

Captura
Un escenario montado de Las Mansiones de la Locura

El trasfondo, en parte, es importante, porque las aventuras están diseñadas de tal manera que si atiendes a este puedes intuir donde se esconden las pistas que te llevarán a resolver el rompecabezas de la mansión.

Los jugadores en sus turnos podrán recorrer las habitaciones de la mansión, que se construye a base de "bloques" de cartón, investigar, luchar contra horrores y no volverse locos en el intento. Especial mención hago a los minijuegos de rompecabezas que recuerdan a sus contrapartidas de los RPG de ordenador para abrir puertas o habilitar mecanismos y que, francamente, me han parecido de lo más original.

En el turno del Guardián de los Arcanos, éste acciona sus maldades para que los investigadores jugadores no consigan resolver el puzzle que plantea la mansión.

Captura
Nuestro Guardián de los Arcanos se pitorrea de nosotros porque nos ha sacado un Cthonian

En conclusión, Las Mansiones de la Locura es un juego que me ha parecido muy divertido y que gracias a las múltiples construcciones de mansiones (y más opciones que habrá con las inevitables expansiones) e historias, dará mucho juego antes de que puedas decir "éste juego ya me cansa". En el lado negativo, si la aventura/mansión no está bien construída, puede hacer la experiencia de juego algo aburrida o tediosa. Afortunadamente en el libro básico vienen un puñado de escenarios y en Internet podrás encontrar de mano de los aficionados aun más material de calidad.

Comentarios (1)

  • Miles
    miércoles, 11 enero 2012 16:44
    Pues yo tengo sentimientos encontrados, por un lado el aspecto visual es magnífico y puede servir incluso como ayudas visuales para partidas de La llamada. Las figuras incluidas molan un rato largo también.
    Es el sistema lo que no me acaba de convencer. La investigación se queda en ir entrando en habitaciones sin más; Los puzzles rompen el ritmo completamente y hacen que si te atascas ahí te quedes y el sistema de combate es tan aleatorio que puedes cargarte a un Perro de Tíndalos de una leche (hecho real) como durar tú un suspiro. Sin contar con que se nota que está capado adrede para sacar más adelante muchos módulos más. El tema de las putadas que va haciendo el guardián de los arcanos al grupo está bien traído en cambio.
    Vamos, que si fuera algo más barato sería compra segura a pesar de tenerlo un colega ya, pero es que 80 eurazos se lo tiene que pensar uno mucho.
  • ¡Patrociname!
  • ¡Patrociname!
  • ¡Patrociname!
  • ¡Patrociname!
  • ¡Patrociname!
Nuestra valoración
8,0

Nota usuarios

1 voto(s)
8,0

Mi nota

Regístrate para votar
ND

Otras reseñas

Las Mansiones de la Locura
Cerrar Cthulhu demanda decidiros que éste emplazamiento utiliza cookies propias y de terceros para facilitar la navegación y si continúas aquí estarás aceptando implícitamente su uso y la condena de tu alma eterna.